Hoy quiero hablar de emprendimiento, de sus pros y sus contras, del gusanillo emprendedor, de experiencias y de motivación para emprendedores. Mi pasión por el emprendimiento se remonta oficialmente a 1992 cuándo, dos años después de haber aterrizado en España, topé con este anuncio de EOI de formación de emprendedoras.
En este programa de EOI se gestó mi primera empresa – import-export y servicios comerciales entre Italia y España -, con la que disfruté y sufrí durante seis años.
Si tienes el gusanillo emprendedor… no te resistas (mucho)
La publicidad de EOI fue providencial y me sentí irremediablemente atraída. Una de las lecciones que he aprendido en todos estos años dedicados a emprender y ayudar a emprender, es que, si tienes un gusanillo emprendedor, antes o después te empujará en esa dirección. Como por casualidad, hará que te topes con medios, personas y circunstancias, que te ayudarán a materializar tus sueños.
Así que, si tienes el gusanillo emprendedor, no te resistas (mucho) 🙂
¿Los síntomas? Inquietud, sientes que te falta algo, que no encajas del todo, que deberías hacer algo distinto… no paras de dar vueltas a ideas y más ideas… ¿Te reconoces?
Hace poco me llamó una chica que trabaja en una multinacional, para que la asesorara en su idea de negocio. ”Tengo una buena situación económica, profesional… pero me pasa algo, no estoy del todo a gusto, no paro de dar vueltas a otras ideas…”. “¡Bienvenida al club!” Le dije sin dudarlo.
Y también está el caso de los emprendedores que de momento no pueden seguir con su proyecto por motivos económicos y pasan “al lado oscuro” (eso mismo me dijo una emprendedora, tras dar ese paso), o sea al trabajo por cuenta ajena. Algunos hasta se disculpan, alegando que es algo temporal. Y sí, muchos de ellos van a «reincidir» y a volver a emprender, ya que no lo pueden evitar.
¿Qué nos motiva a emprender?
Recientemente, para preparar un taller sobre este mismo tema, se me ocurrió realizar una breve encuesta entre los emprendedores más cercanos. Comparto aquí una selección de las respuestas a la pregunta “¿Qué te ha motivado a emprender?”.
Las razones por las que se emprende son: libertad, ser dueño de mi vida, hacer lo que siempre he querido hacer, expresarme libremente… Lo que sí está claro, es que nos une la pasión. Lejos de ser una carga, ¡nuestro trabajo nos chifla!
Lo mejor y lo peor de emprender
Siguiendo con mi encuesta, entre lo mejor de emprender encontramos: el orgullo de ir avanzando, los aprendizajes, la experiencia, ir consiguiendo metas, la libertad, el desarrollo personal y profesional, los nuevos retos, buscar caminos uno solo sin nadie que te diga lo que tienes que hacer…
Y entre lo peor de emprender, encontramos: la soledad, la incertidumbre, las dificultades económicas, el control de las emociones, la responsabilidad, tener que hacer frente a las consecuencias uno solo…
Motivación para emprendedores
Emprender es apasionante, pero a la vez duro. Me gusta compararlo con una montaña rusa, tanto a nivel emocional, como por las buenas y malas noticias que se suceden. En mi trabajo de mentora he visto a la misma persona experimentar la felicidad más absoluta y, al día siguiente, la tristeza más abismal. Lo que recomiendo siempre a los más novatos es no creérselo mucho, ni cuándo estén muy arriba, ni cuándo estén muy abajo. En ambos casos hay que seguir trabajando con tenacidad. Y siempre con sentido común y mucho realismo, también para entender cuándo se hace necesario cambiar de dirección o incluso detenerse.
Y para seguir adelante con fuerza, incluso en los momentos en los que tocas fondo en la montaña rusa del emprendimiento, motivarse es vital. ¿Cómo hacerlo? A continuación he recopilado algunas vitaminas de motivación para emprendedores, fruto de las experiencias de los emprendedores de mi entorno, de lo que yo me aplico en mi día a día y de la investigación que llevo a cabo sobre el tema.
Conseguir pequeñas metas
Resulta muy gratificante y es una señal de que estás avanzando en el camino que te has propuesto. En la práctica consiste en identificar y perseguir objetivos diarios, semanales, mensuales. La técnica SMART es muy recomendable para definir objetivos que sean específicos, medibles, alcanzables, realistas, dentro de un tiempo determinado.
Recompensas
Determinar recompensas que sean significativas para ti, para la consecución de un objetivo o simplemente de un día de trabajo bien hecho, también resulta motivador. Yo suelo concederme ½ día de desconexión tras finalizar un proyecto, también para reponer fuerzas. Asimismo deporte y cuidados no deberían faltar en la rutina diaria. Si queremos rendir, hay que cuidarse y el emprendimiento requiere mucho esfuerzo.
Productividad
Para motivarte sabiendo que no estás perdiendo el tiempo, sino dedicándote de lleno y con energía al trabajo que de verdad importa, establecer buenos hábitos de productividad es esencial. Asignar bloques de tiempo de calidad, mantener el foco, evitar ladrones de tiempo y distracciones – sobre todo digitales – es clave.
Para acercarme al estado mental que se conoce como flow y volcarme en lo que me ocupa en el momento, me ayudó mucho utilizar una herramienta que se llama Toggl y que mide los tiempos de dedicación a proyectos y tareas. En el momento en que arranca el timer y me vuelco en la tarea, no estoy para nada más.
Disciplina
Hay emprendedores de éxito que completan el 30% del trabajo antes de las 3 horas de despertarse, otros se levantan muy pronto… Todo va en función de los ritmos de cadauno. Lo que sí está claro es que establecer rutinas y disciplinarse nos ayuda a conseguir los objetivos que nos hemos marcado y a mantener elevado nuestro nivel de motivación. Me gusta aplicarme esta frase de William Faulkner, que siempre he encontrado muy motivadora.
Sólo escribo cuándo estoy inspirado. Por suerte estoy inspirado todos los días a las 9 de la mañana
Contra la soledad
Hemos visto que la soledad a menudo se cita entre «lo peor» de emprender. Para luchar contra la soledad, en el frente del trabajo diario es importante saber atraer y rodearse de colaboradores y de aliados y delegar en la medida de lo posible. Y externamente, tenemos la inmensa suerte de poder participar en todo tipo de eventos para emprendedores y hacer networking con unos y otros. Incluso, por qué no, podemos crear nuestros propios encuentros con otros emprendedores.
Otra opción muy a tener en cuenta es la participación en centros o programas de coworking. Siempre hay en marcha algún programa, por ejemplo del tipo del Programa Coworking de Madrid de EOI, que tuve el honor de dirigir como Mentora Residente de las últimas 6 ediciones. Si estás afectado por el virus del emprendimiento, es muy recomendable que participes en este tipo de programas, que ofrecen espacio de trabajo, mentoring, formación, asesoramiento, acompañamiento personalizado y eventos. Y lo mejor de todo, ¡GRATIS!, ya que muchos de ellos están financiado por el Fondo Social Europeo. Busca información actualizada, también a través de los medios de comunicación del ecosistema emprendedor, como El Referente y Emprendedores y su guía Quién te ayuda a emprender.
Inspírate
En algunos momentos necesitamos también recurrir a elementos de motivación externa: casos de superación, historias de otros emprendedores con sus éxitos y fracasos, frases motivacionales que parecen escritas justamente para nosotros… ¿Tienes o has pensado en crear tu propio repositorio de frases que te funcionan, dónde acudir en caso de necesidad? Yo tengo también una colección de mensajes recibidos a lo largo de estos años, que me emocionaron en su momento y me siguen motivando a avanzar.
“Mientras he emprendido, lo he probado todo»
Esta frase de una amiga emprendedora también constituye una fuerte motivación. Nuestro día a día como emprendedores hace que acumulemos un enorme bagaje de experiencias, aprendizajes, roles, éxitos y fracasos y, en definitiva un fuerte impulso para nuestro crecimiento personal y profesional.
Emprender es una forma de vivir.
¿Y tú? ¿Tienes el gusanillo emprendedor? ¿Cómo te motivas en tu día a día?
Buenísimo Silvia, eres la esencia pura de los emprendedores.
Me encanta tu primer contacto con la EOI, no conocía esa historia tan bonita que os mantiene juntos todavía.
Enhorabuena y gracias por aportar tanto doctora Mazzoli!
Muchas gracias, Yolanda, me alegra mucho que te haya gustado. ¡Sigue con tu entusiasmo y tu enorme ayuda a los emprendedores! Se necesitan personas como tú.